Nacido en Barcelona (Pueblo Seco) el año 1951, de siempre siente atracción por trabajar con las manos, por el trabajo artesanal. Trabaja la madera, la arcilla y la forja de hierro como medio para ganarse la vida, mientras la afición por el dibujo se va formando en él. La estancia en Paris entre los años 1970 y 1971 y el viaje por Alemania el 1972, le dan una visión de qué tipo de arte se esta haciendo en Europa. Un hábito, el de observar, que todavía conserva ahora y que le llevan a pasear por el continente continuamente.
La obra de los últimos años de Kim Soler está hecha primordialmente de pintura realista o hiper-realista. Sus bodegones reproducen objetos, frutas , muebles......con una precisión fotográfica. Pero sería un error etiquetar este trabajo puramente como una reproducción de la realidad. Ha llegado a este punto como resultado de búsqueda incansable de la belleza, del perfeccionamiento técnico acumulado. "Cuando consigo un efecto que se me resistía, siento una verdadera satisfacción". Esta meticulosa ordenación y profundización en el trabajo se extiende también a otros aspectos de la vida. Tiene un archivo fotográfico, perfectamente catalogado y ordenado de todo cuanto ha hecho, y son más de mil sus obras.
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